Es muy dificil escribir sobre Evita y no caer en lo común.
Pasaron 61 años de su desaparición física y su proyección es inmensa. Una eternidad bien ganada.
Venció a la muerte. Evita vive en el corazón de milones. Tal lo prometido retornó de ese modo.
Cada mujer de Argentina debiera reservar la más altas de las estimas a una persona que empeñó su juventud y corta vida a la entrega incondicional por sus desposeídos.
Una gran mujer sin dudas que conquistó el corazón de un coloso como Juan Domingo Perón y le otorgó todas sus energías a un amor tan inmenso como su apasionado romance con el Pueblo.
Un ícono que superó las fronteras de Argentina.
Evita fue sin dudas una militante, apasionada y comprometida.
Con un sentimiento profundamente antiimperialista, se convirtió en enemiga implacable del privilegio y la
injusticia.
Evita fue la contracara de una Argentina oligárquica anterior al peronismo. El odio manifiesto que le profesaron
las clases dominantes y dieron lugar a una persecución contra su
legado, recuerdo y restos mortales durante décadas, hasta el "ultraje canalla" no es casual. Un odio que aún se expresa y de distintos modos en otros espejos, como un gen que se resiste a autoreconocerce como egoísta y antisolidario social. Eva Duarte de Perón fue sin temor a equivocarme, la mujer más importante de la política nacional argentina.
Fue los inevitables latidos del corazón de un movimiento, imprimiéndole alma y sensibilidad al espíritu del peronismo.
Todas las conquistas sociales otorgadas a las mujeres, igualando su condición de ciudadana con el hombre a través de la admisibilidad del "Voto femenino" son el más fiel testimonio las obras de Evita, incrporando el género femenino a espacios que les eran vedados en la sociedad de Argentina.
Su amor e incondicionalidad por la infancia y los ancianos, abrazando la causa justa de los trabajadores y sus derechos señalaron el camino de la inclusión social como el mejor destino de una Patria Justa y Soberana.
El llanto que derramaron millones de habitantes de nuestro país hace 61 años estaba absolutamente justificado. Había fallecido la "Jefa Espiritual de la Nación Argentina", para retornar eterna en millones de corazones.
Había fallecido en 1952 a los 33 años de edad. Y toda su obra la realizó desde sus jóvenes 26 años con los que contaba en 1945 al ascender a la presidencia el Gral. Juan Domingo Perón.
Evita. Más que una leyenda... Una realidad. Una gran Verdad.
Había fallecido en 1952 a los 33 años de edad. Y toda su obra la realizó desde sus jóvenes 26 años con los que contaba en 1945 al ascender a la presidencia el Gral. Juan Domingo Perón.
Evita. Más que una leyenda... Una realidad. Una gran Verdad.
Donna Summer interpreta a EVITA... Don`t cry for me
Argentina... (No llores por mi Argentina)
Si habrá sido grande Evita... criticada... insultada e injuriada en su época por
cotemporáneos incomprensivos...
Una realidad que se repite...
Madonna (1996) - en ocasión de rodar su film "Evita" de Alan Parker
Será difícil de comprender
Que a pesar de estar hoy aquí
Soy del pueblo, jamás lo podré olvidar
Debéis creerme
Mis lujos son solamente un disfraz
Un juego burgués, nada más
Las reglas del ceremonial
Tenía que aceptar, debí cambiar
Y dejar de vivir en lo gris
Siempre tras la ventana sin lugar bajo el sol
Busqué ser libre pero jamás dejaré de soñar
Y sólo podré conseguir la fe que queráis compartir
No llores por mí, Argentina
Mi alma está contigo
Mi vida entera te la dedico
Mas no te alejes, te necesito
Jamás podréis ambicionar
Mentiras dijeron de mí
Mi lugar vuestro es, por vosotros luché
Yo sólo quiero sentiros muy cerca
Poder intentar abrir mi ventana
Y saber que nunca me vais a olvidar
No llores por mí, Argentina
No llores por mí, Argentina
Mi alma está contigo
Mi vida entera te la dedico
Mas no te alejes, te necesito
¿Qué más podré decir
Para convenceros de mi verdad?
Si aún queréis dudar mirad mis ojos
Ved como lloran de amor
No llores por mí, Argentina
Mi Argentina
Soy del pueblo, jamás lo podré olvidar
Debéis creerme
Mis lujos son solamente un disfraz
Un juego burgués, nada más
Las reglas del ceremonial
Tenía que aceptar, debí cambiar
Y dejar de vivir en lo gris
Siempre tras la ventana sin lugar bajo el sol
Busqué ser libre pero jamás dejaré de soñar
Y sólo podré conseguir la fe que queráis compartir
No llores por mí, Argentina
Mi alma está contigo
Mi vida entera te la dedico
Mas no te alejes, te necesito
Jamás podréis ambicionar
Mentiras dijeron de mí
Mi lugar vuestro es, por vosotros luché
Yo sólo quiero sentiros muy cerca
Poder intentar abrir mi ventana
Y saber que nunca me vais a olvidar
No llores por mí, Argentina
No llores por mí, Argentina
Mi alma está contigo
Mi vida entera te la dedico
Mas no te alejes, te necesito
¿Qué más podré decir
Para convenceros de mi verdad?
Si aún queréis dudar mirad mis ojos
Ved como lloran de amor
No llores por mí, Argentina
Mi Argentina
No hay comentarios:
Publicar un comentario